No se trata del regreso del Concorde, sino que de aviones comerciales convencionales que llegaron a sus destinos antes de lo previsto, alcanzando velocidades de hasta más de 1.300 kilómetros por hora.

Le ocurrió a distintos vuelos de Virgin Atlantic Airways, United Airlines, British Airways y American Airlines, cuando durante sus respectivos trayectos a más de 35 mil pies de altura, se vieron impulsados por inusuales corrientes de viento que llegaron hasta los 426 kilómetros por hora.

El fenómeno fue reportado el último fin de semana sobre Wahington por el Servicio Meteorológico de Estados Unidos, que advirtió la posible ocurrencia de turbulencias en esas altitudes en las que normalmente viajan las aeronaves de pasajeros, aunque siempre a una velocidad crucero de poco más de 920 kilómetros por hora.

En total, fueron cinco los vuelos afectados que no reportaron mayores inconvenientes. Los pasajeros no sintieron que viajaban por sobre la barrera del sonido, aunque los pilotos y la tripulación -y algunos pasajeros que se entretienen siguiendo el viaje por GPS- sí  lograron tomar nota de lo que ocurría.

Los que superaron holgadamente la velocidad de 1 mach fueron el vuelo 64 de United, cuando tras despegar desde Newark con destino a Lisboa, llegó a 1.343 kilómetros por hora sobre la costa este de EE.UU. Y aún más rápido llegó el vuelo 120 de American Airlines, que media hora después de salir  desde Philadelphia rumbo a Doha, alcanzó los 1.343 kilómetros por hora.

También el servicio 22 de Virgin Atlantic anotó 1.290 kilómetros por hora cuando poco antes de la medianoche surcaba el cielo sobre Long Island en su ruta hacia Londres. Y aunque les faltó poco para llegar a 1 mach (1.290 km/h), el vuelo 292 de British reportó el domingo velocidades de 1.126 kilómetros por hora, lo que se tradujo en que aterrizara casi media hora antes en la capital británica procedente de Washington. Le ocurrió lo mismo a otro avión de la misma compañía que cubría el mismo itinerario en ese tramo horario.